Había sido avistado por Prefectura, que finalmente y en medio de un fuerte temporal lo dejó huir por razones de seguridad. Ahora interviene el Juzgado Federal de Rawson, a cargo de Gustavo Lleral, el mismo del caso Maldonado
Luego de horas de infructuosa persecución por parte de una nave Guardacostas de la Prefectura Naval Argentina, un buque chino que estaba pescando ilegalmente en aguas del Mar Argentino, se dio a la fuga.
Trascendidos iniciales recogidos por publicaciones especializadas aunque no confirmados por las delegaciones de Prefectura con las que durante la tarde de ayer intentó contactarse Infobae, habían señalado que tras la persecución inicial el buque infractor había sido detenido, pero finalmente se fugó a aguas internacionales.
En un comunicado Prefectura señaló que “luego de varias horas de operativo, y en medio de un temporal muy fuerte de viento y olas, habiendo obtenido todas las pruebas respaldatorias y técnicas para determinar la posición e identificación del buque, se decidió dar por finalizada la operación, con el fin de resguardar la vida de las tripulaciones de ambas embarcaciones”.
Todo comenzó muy temprano en la mañana del martes, cuando el Guardacostas Prefecto Fique, de Prefectura, avistó 390 kilómetros mar adentro a la altura de Puerto Madryn un buque de captura de calamar (en la jerga, “potero”) “en plena tarea de pesca” que al intentar ser identificado se dio a la fuga.
Prefectura estaba realizando tareas de patrullaje y vigilancia marítima a pedido del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca luego de que el fin de semana pasado se detectara una masiva e ilegal incursión de cerca de un centenar de buques extranjeros, en su mayoría chinos, cuyo testimonio visual fue difundido el lunes por Infobae.
La nave infractora estaba a la altura del paralelo 42 (que en tierra delimita las provincias de Río Negro y Chubut), en la misma zona en la que el sábado por la tarde el capitán Alberto Mendoza, del buque argentino Don Pedro, detectó con el radar de su embarcación la incursión de cerca de un centenar de buques extranjeros pescando ilegalmente calamar en aguas argentinas, en un área de 44 por 11 kilómetros aproximadamente y hasta unos 18 kilómetros (diez millas marinas) dentro de la Zona Económica Exclusiva.
In fraganti
Según el comunicado de la fuerza argentina, el buque chino, identificado como “Lu Rong Yuan Yu 668” estaba “en plena actividad, con sus luces de faena encendidas, artes de pesca desplegadas y en funcionamiento, por lo que se puso en ejecución el protocolo de disuasión para que cesara la actividad de pesca y pudiera ser inspeccionado por una dotación de visita”.
Con ese objetivo, informó Prefectura, “se efectuaron reiteradas llamadas por radiofrecuencia en español y en inglés y se realizaron señales sonoras y visuales para hacer contacto con el capitán”. Pero el buque chino apagó sus luces de pesca y empezó a navegar hacia aguas internacionales, “sin responder a los permanentes llamados por distintas frecuencias del servicio móvil marítimo, por lo que se inició su persecución”.
En apoyo del buque Guardacostas Fique decoló desde Comodoro Rivadavia el avión patrullero marítimo PA-22, también de Prefectura, que voló hacia la zona. El guardacostas Fique no perdió contacto visual con el buque infractor chino, que nunca respondió a las comunicaciones radiales e incluso, en situaciones de posible abordaje, se posicionaba de modo de impedirlo.
Finalmente, informó Prefectura, “siguiendo el protocolo de actuación de la República Argentina, basado en lo establecido en la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho, el guardacostas continuó la persecución mar adentro pero tras varias horas de operativo, y en medio de un temporal muy fuerte de viento y olas, habiendo obtenido todas las pruebas respaldatorias y técnicas para determinar la posición e identificación del buque, se decidió dar por finalizada la operación, con el fin de resguardar la vida de las tripulaciones de ambas embarcaciones”.
A consecuencia de lo sucedido se inició un sumario administrativo y judicial por infracción al Régimen Federal de Pesca (ley 24.922) y resistencia a la autoridad dentro de la Zona Económica Exclusiva de la Argentina. La causa quedó en manos del Juzgado Federal de Primera Instancia Nº 2 de Rawson, a cargo de Gustavo Lleral (el mismo que resolvió el caso Santiago Maldonado). Este miércoles se pediría la captura internacional del buque prófugo.
Nota al presidente
Luego de que el sábado un buque argentino verificara una masiva incursión de pesqueros extranjeros en la Zona Económica Exclusiva de la Argentina, “Intercámaras Pesqueras de la Argentina”, suerte de Mesa de Enlace del sector, envió el domingo una nota al presidente de la Nación, Alberto Fernández, denunciando la masiva violación a la soberanía y la pesca predatoria por parte de flotas –decía la nota- “mayormente asiáticas, fundamentalmente chinas”.
Por eso mismo, el ministerio de Agricultura, “dispuso la intervención y puesta en marcha del protocolo de acción preventiva con la Prefectura y la Armada para aportar todos los recursos del Estado en el esclarecimiento de esta situación y generar la información oficial necesaria para la aplicación de sanciones”, según explicó el subsecretario de Pesca de la Nación, Carlos Liberman.
No es la primera vez que un buque chino, detectado en plena infracción, se da a la fuga.
La preocupación de fondo del sector pesquero es la falta de regulación de la llamada “Milla 201”, esto es, de qué modo evitar que centenares de buques pesquen muy cerca de los límites, depredando recursos e incursionando oportunísticamente -ante las limitaciones de patrullaje y control por parte de la Armada y la Prefectura Naval Argentina- en Mar Argentino.
Impacto económico
La depredación de las reservas pesqueras por parte de más de 300 naves extranjeras cada año daña notablemente al sector pesquero argentinoLas exportaciones pesqueras aportaron USD 2.148 millones en 2018, según el último informe anual de la Cámara de Armadores de Pesqueros y Congeladores de la Argentina (Capeca) y son un recurso importante para las provincias y puertos del sur argentino.
Según la nota de “Intercámaras pesqueras” al presidente,, cada buque extranjero pesca entre 40 y 50 toneladas diarias. Juan Redini, titular de la Cámara de Armadores Poteros de la Argentina (CAPA, que agrupa a las empresas dedicadas a la pesca del calamar) estimó que lo que se observó el sábado significa una pesca de cerca de 4.000 toneladas de calamar por parte de buques extranjeros, en su mayoría chinos, en la “Zona Económica Exclusiva” de la Argentina. En diez días así, estimó, los buques extranjeros estarían detrayendo unos 100 millones de dólares de potenciales exportaciones argentinas.
Fuente: Infobae