El gabinete de Economía debutó con un préstamo para Aguas del Norte. Se aprobó, además, que el Macro financie saldos de obras por $100 millones.
En medio de los recortes de gastos y el déficit de recursos que la Provincia empezó a asumir en las últimas semanas, el flamante ministro de Economía, Emiliano Estrada, tuvo que echar mano a una ley aprobada en 2014 para tomar una deuda de $400 millones, con el fin de afrontar el pago de obras de Aguas del Norte.
La medida se suma a una reciente resolución firmada por el mismo funcionario y el ministro de Infraestructura, Tierra y Vivienda, Baltasar Saravia, para que el banco Macro financie hasta $100 millones de los saldos que mantiene el Gobierno con contratistas por certificaciones de obras.
La deuda por $400 millones, que se emitió bajo un gran hermetismo el viernes pasado, tuvo 23 ofertas, de acuerdo a las constancias del mercado de capitales a las que accedió El Tribuno.
Los intereses del crédito, que no podrán ser inferiores al 28%, se liquidarán cada tres meses durante dos años y medio. La operatoria se hizo, también, a través del Macro, agente financiero de la Provincia.
Estrada explicó a este diario que el préstamo es el remanente de los $650 millones que la Legislatura local habilitó a negociar hace dos años. En aquella oportunidad se colocaron títulos por $250 millones con el destino de un plan para la provisión de agua potable y cloacas en distintas localidades.
«Estos fondos van a servir para obras que están en funcionamiento, que las fue financiando la Provincia con otros recursos de rentas generales, y para obras que se van a desarrollar en los próximos meses, como las que se ha comprometido a realizar el gobernador en el departamento San Martín la última vez que estuvo en el lugar junto al presidente de Aguas del Norte», dijo el ministro de Economía.
Contratistas
En el Boletín Oficial, ayer se publicó la resolución que aprueba la línea financiera del banco Macro para contratistas de obras públicas. La entidad financiará hasta $100 millones de las deudas que mantiene la Provincia con las constructoras por certificaciones no pagadas.
El ministro de Infraestructura, Tierra y Vivienda, Baltasar Saravia, detalló a El Tribuno que las empresas que se adhieran a ese instrumento podrán cobrar de manera inmediata los saldos, pero deberán afrontar el 70% de los intereses bancarios. El porcentaje restante lo asumirá el Gobierno junto a la cancelación del préstamo que tiene un plazo de reembolso de seis meses.
«Es un beneficio desde el punto de vista financiero para la Provincia y también para las contratistas, que tendrán la posibilidad de contar con los fondos de manera inmediata», consideró Saravia.
Dio a conocer, además, que hasta ahora la deuda provincial con las contratistas que se asumió asciende a los 48 millones.
Pago multimillonario
Hoy desde el Ministerio de Economía se deberá desembolsar $2.108 millones para cancelar los vencimientos de las últimas tres letras del Tesoro que emitió entre agosto y octubre para hacer frente a gastos corrientes (pago de sueldos y servicios).
«Desde el día que asumimos los dos objetivos centrales que tuvimos en el corto plazo fue hacer frente a las letras y al pago de sueldo y aguinaldo, con lo cual la cancelación de las letras está garantizada», dijo Estrada.
Créditos para tapar agujeros financieros
Para gastos corrientes, el Gobierno emitió este año nueve series de créditos cortos que sumaron casi $6 mil millones, con un interés acumulado de $372 millones. El déficit financiero se arrastra desde fines de 2015, cuando se colocaron $450 millones en letras. En 2016 la emisión llegó a $2.700 millones.
FUENTE: EL TRIBUNO